Estas dos semanas he podido disfrutar de entretenidas jornadas. Con capturas difíciles y los ríos preciosos. Además de poder disfrutar de la compañía en algunas de estas jornadas de mi amigo Jesús que me sorprendió con el buen uso de las emergentes de culo de pato en situaciones difíciles (y eso que le robaron la linea de seda).
Una de las noticias más agradables ha sido el poder disfrutar de un chiquitín río de esos en los que para junio salen a pasear las bellísimas Danicas. Hacia unos años que había dejado de ser lo que era y al pescarlo este año he podido comprobar como se va recuperando. Gran cantidad de alevines y un aumento de las truchas de mediano tamaño me dejaron una de las más gratas y mejores sorpresas.
Las truchas se han comportado como en agosto, poco activas y en ocasiones aletargadas sin duda por la intensa calor. Pescando al agua no conseguía o no sabia hacerlas entrar a mis ninfas y con la seca si no estaban puestas te hinchabas a lanzar sin casi resultados. Lo mejor era pescar y avanzar despacio, muy atento a las posibles cebadas y aprovechar esas truchas puestas para ir sumando truchas. Me ha sorprendido el tamaño de varias truchas que he clavado y alguna que me ha partido. Sin duda jornadas inolvidables que han necesitado poner los cinco sentidos en la pesca.
Saludos y buena pesca.